Una de las preguntas mas realizadas últimamente cuando se va a solicitar financiación, es que tipo de préstamo contrato, a tipo fijo o variable.
La ventaja del tipo fijo es la seguridad, ya que independientemente de la situación económica o geopolítica, siempre es el mismo tipo de interés y por tanto la misma cuota.
Hasta ahora los tipos de interés fijos, si eras un buen cliente y contratabas o tenías los productos que bonificaban, eran realmente atractivos.
Debido a la situación económica y política las hipotecas a tipo fijo se han encarecido bastante en los últimos 2 meses.
El tipo variable, por regla general es más beneficioso a corto plazo, pero queda la incertidumbre a largo plazo.
Según las últimas noticias publicadas el tipo de interés va a subir varias veces este año, y el Euribor – que llevaba varios años en negativo- , va ser positivo y posiblemente terminara el año cercano al 1%.
Las hipotecas a tipo variable que has sido revisadas, han visto incrementada su cuota, y probablemente así será en todas las revisiones de hipotecas a tipo variable de este año.
Por lo tanto, actualmente, que tipo de hipoteca aconsejar al cliente es una tarea difícil, que habrá que estudiar en cada caso y teniendo en consideración el perfil de las personas que van a contratar el préstamo.